El Departamento de Labor ha obtenido una orden en contra de una unidad acusada de proveer a sus empleados condiciones de hospedad ilegales bajo el programa de visas H-2A y violar derechos de granjeros. G Farms está acusada de no ofrecer a sus trabajadores un salario fijo por hora, mantener registros de las horas trabajadas, y de ofrecer alojamientos peligrosos y deficientes a 69 trabajadores de agricultura en El Mirage, Arizona.
G Farms afirmó, en su aplicación para la visa H-2A, que ofrecería a sus empleados alojamiento dentro de unas unidades móviles. Sin embargo, G Farms ha estado alojando a sus empleados en tráileres y buses escolares convertidos; violando un número de códigos de seguridad, sanitación y peligro de incendio. Los buses y los tráileres aparentan estar sobre ocupados, con poca ventilación, camas de tope a tope, y temperaturas que pueden subir hasta sobre 100 centígrados durante el mediodía.
“Los actos por los que se le acusa a G Farms son simplemente inhumanos,” dice el US Secretario de Labor Alexander Acosta. “Ningún trabajador merece ser tratado así. Además, empleadores honestos no pueden competir con empleadores que rompen la ley, maltratando a sus empleados, y pagándole menos de lo debido.”
“Las condiciones aquí son verdaderamente sorprendentes, y presentan un verdadero riesgo a las vidas de estos granjeros, a quien parecen haber sido expresamente engañados sobre las condiciones de alojamiento que tendrían, antes de llegar a Arizona. La falta de cuidado que muestran por la habilidad de estos granjeros a sobrevivir hasta el próximo día de trabajo, es tan preocupante como el abuso de los requerimientos estrictos del programa de la Visa H-2A cometidos por los empleadores y los agentes de recluto. Violaciones de esta ley federal también hieren a trabajadores americanos que quizás quisieran estos trabajos si los empleadores proveerán hospitalidad adecuada y sueldos justos. Al igual que a empleadores que siguen la ley, tratan bien a sus empleados, y pagan salarios justos,” dice Janet Herold, solicitadora regional de San Francisco.
El programa agricultor temporal de la visa H-2A establece una manera para que empleadores agricultores, en anticipación de escasez de empleados, traigan empleados extras temporales, no inmigrantes, a los Estados Unidos para servicios y trabajos agrícolas. Este año, más de 150,000 trabajadores han sido certificados bajo este programa.
El programa requiere que el empleador afirme al departamento que ofrecerá, a sus empleados, un salario que iguale o exceda lo más alto de lo siguiente: el salario regular por la ocupación o región, el salario mínimo federal, o el salario mínimo estatal. Este salarió será pagado a trabajadores del H-2A y a algunos empleados americanos similares durante el periodo de labor aprobado. El programa también establece un standard de reclutamiento y desplazamiento para la protección de empleados americanos similares. Activistas de inmigrantes han aclamado que este caso por fin demuestra los problemas del programa de visa H-2A.